¿Recordáis los tiempos en los que después de pintar tocaba limpiarse las manos con un buen chorretón de aguarrás? ¿Os acordáis de aquel olor y esa sensación de aspereza? Menos mal que los tiempos cambian; y en este caso, para bien.
Quienes últimamente hayáis intentado limpiaros las manos con aguarrás después de utilizar una moderna pintura plástica o al agua, habréis comprobado que no sirve de nada. Es más, la cosa empeora.
¿Significa eso que estamos condenados a exfoliarnos la mano con el cepillo para sacar las manchas más incrustadas? Pues no, porque por suerte ahora tenemos el Gel Limpiador de Manos de Beissier.
Ahora bien ¿por qué utilizar un producto específico pudiendo usar jabón? Pues bien, ahí van tres buenas razones.
Para empezar porque el Gel Limpiador de Manos de Beissier desincrusta lo mismo manchas de pintura que de alquitrán, restos de cola, grasas… ¡así que es posible que os veáis usándolo más a menudo de lo que pensáis!
Además, desincrusta las manchas con facilidad. Al fin y al cabo, no se trata de estrenar una capa de piel nueva cada vez que pintáis… ¡es preferible que la que ya lleváis puesta se vea limpia!
Y no es solo que al disolver las manchas vayáis a evitaros tener que frotar como locos, es que además la fórmula del Gel Limpiador de Manos respeta el equilibrio de la piel y evita que se irrite.
¿Convencidos? ¿No? Entonces solo os queda probarlo.