Al retirar algún cuadro, un aplique u otro tipo de decoración de la pared pueden mostrarse antiestéticos agujeros o desprendimientos del revestimiento de la pared. Si no quieres una pared deslucida, sigue nuestros consejos. Conseguirás que vuelva a recuperar el esplendor de antaño.
01 Rellena el desperfecto
Comienza rellenando el desperfecto con Aguaplast Pluma o Aguaplast Renovación.
02 Da textura a la masilla
Una vez hecho esto puedes darle un efecto de textura a la masilla para igualarlo al irregular gotelé de alrededor. Para ello utiliza, si quieres, el dedo o la esquina de la espátula. Aplica masilla con estos elementos sobre el arreglo y retíralos rápidamente. Así conseguirás un acabado en forma de pico, imitando al del gotelé. Lava las herramientas o tu dedo una vez hayas acabado con agua.
Como el acabado no tiene que ser perfecto, déjalo secar según las indicaciones del producto. Tras un tiempo, podrás pulir con una lija aquellas imperfecciones que no te convenzan o si tienes un gotelé de grano fino, pulir los salientes de masilla para redondearlos.
03 Pinta la pared
Si quieres que el desperfecto se camufle aún más, pinta encima utilizando un tono parecido al de la pared.
¡Voilà! Como ves es un trabajo de reparación muy sencillo, rápido y sobre todo económico. ¿A qué esperas para ponerlo en práctica?