Los suelos de madera ayudan a crear un espacio acogedor y agradable en tu casa. Además sirven como base para poder crear múltiples ambientes, desde un estilo rústico hasta una decoración más elegante y actual.
Hoy te enseñaremos a cuidar de este tipo de suelos para que puedas devolver el esplendor a la habitación. Veamos cómo:
- Para realizar la limpieza del día a día, tan sólo debemos pasar una mopa o el aspirador. De esta manera eliminaremos el polvo superficial.
- Si hay alguna mancha en el suelo, añade unas gotitas de vinagre en un cubo con agua, friega con esta solución y límpiala antes de que penetre en la madera. Si persisten, puedes usar tranquilamente alcohol.
- Procura colocar alfombras, alfombrillas o felpudos en lugares de tránsito como la entrada de casa, junto al sofá o debajo de la mesa del comedor. Así evitaremos las posibles manchas y rozaduras de zapato o muebles en el suelo.
- Si el suelo muestra ralladuras, desperfectos o zonas en la que los tablones se han separado, puedes aplicar una masilla para madera de un color parecido al del suelo. Prueba con Aguaplast Madera: tan solo tienes que aplicar un poco de producto directamente desde el tubo y arrastrar una espátula sobre la superficie para rellenar la zona a reparar. Posteriormente, puedes limpiar los restos de material que se hayan salido con un trapo mojado. ¡Listo, tu suelo como nuevo!
- Recuerda que para evitar los arañazos no hay nada como colocar tacos protectores bajo las patas de los muebles.
- Para abrillantar un suelo apagado, y aunque parezca contradictorio, evita aplicar cera, ya que tras varios aplicados creará una fea capa sobre la superficie. En su lugar, utiliza un producto hidratante especial para suelos de madera.
- Por último, si lo que te preocupa son esas marcas negras de zapato sobre el suelo, utiliza una goma de borrar para eliminarlas. Sencillo y rápido.
Esperamos que estos pequeños trucos te hayan ayudado a dejar el suelo de tu casa como el primer día.