Jon, un bricolador de Donosti ha compartido con nosotros un trabajo muy sencillo pero que ha afrontado de una manera poco ortodoxa. Así nos lo contaba él mismo:

«Se nos rompió el dispensador de papel higiénico, que estaba anclado por los dos lados, y como no encontramos un modelo que tuviera exactamente la misma distancia entre tornillos, optamos por uno de un solo anclaje. El problema ahora consistía en tapar el otro agujero que había quedado a la vista. El agujero afectaba a dos azulejos, porque estaba directamente sobre la junta.

Lo primero que hice fue tapar el agujero con Aguaplast Pluma. A juzgar por la cantidad de masilla que cupo, sospecho que el azulejo no está muy bien colocado, pero bueno… La masilla no la apliqué hasta el borde, porque quería poner en práctica una idea un poco peregrina que tuve: rematar la reparación con un kit de reparación de suelos laminados. Estos kits traen varios tacos de ceras de colores y un aplicador que se calienta mediante una pequeña corriente (a partir de una pila). Con el aplicador caliente se va fundiendo la cera y a continuación se aplica sobre la zona en la que el suelo laminado haya perdido la impresión. En mi caso la idea era «reconstruir» los dos bordes del azulejo con ella.

Normalmente hace falta desplegar un poco de arte con estos kits, porque es raro que uno de los tacos traiga el color exacto que deseamos, y suele ser necesario mezclar un par de ceras. Eso por no hablar de que, a nada que el desperfecto sea grande, hay que imitar las manchas, las vetas de la madera, etc. En mi caso ningún taco era del color de la baldosa, así que me líé a mezclar ceras. Hubo un momento en el que me estaba quedando de pena y estuve a punto de tirar la toalla, pero después, no sé ni cómo, la cosa cuadró. Ahora es realmente difícil intuir que ahí hubo un agujero. Lo que más «canta», de hecho, es la junta, que en mi caso es gris y no he podido disimularla bien. La cera, por cierto, se pone durísima una vez que se enfría, así que dudo que se desprenda nunca. Ahí os dejo unas fotos»

Nosotros no podemos saber si la reparación durará o no, pero no cabe duda de que es, desde luego, una solución original y con la que Jon ha conseguido un gran resultado. ¡Tomamos nota!