Después de haber abierto una roza, es casi seguro que habrá polvo de ladrillo, yeso u otro tipo de restos. Antes de aplicar Aguaplast Express es necesario limpiar a fondo la zona. Podemos utilizar un cepillo para retirar los restos mayores. Un truco muy bueno es terminar pasando el tubo de la aspiradora para quitar el polvo de yeso.

En un cubo de plástico, añadiremos 0,45 litros de agua por cada kilogramo de producto. Después mezclaremos con la espátula hasta obtener una pasta consistente y homogénea.

Una vez tengamos lista la mezcla es importante no dejar pasar demasiado tiempo, ¡Aguaplast Express lleva ese nombre porque seca muy rápido.

Aplicamos la mezcla con la ayuda de un llana o una espátula metálica. Una vez terminado el trabajo, limpiaremos las herramientas inmediatamente.

Por último, recuerda dar un lijado ligero antes de aplicar la pintura.

Lo primero que deberemos hacer es limpiar bien todas las baldosas. Debemos asegurarnos de que no queden restos de grasa o polvo que puedan dificultar la adherencia del plaste.

A continuación, protegeremos el perímetro de la zona en la que vayamos a trabajar con cinta de carrocero. ¡Sé generoso y hazte con cinta de carrocero ancha!

El siguiente paso es preparar el producto mezclando con agua Aguaplast Express, un plaste blanco multiusos de gran adherencia. Es importante elegir bien el producto, porque no todos los plastes pueden usarse sobre superficies no absorbentes como la cerámica. Y te aseguramos que un plaste que se descuelga, puede convertirse en una auténtica pesadilla.

Por otra parte, como Aguaplast Express es un plaste de secado rápido, si la superficie es grande realizaremos la mezcla poco a poco para evitar que se seque.

Una vez tengamos el producto preparado, lo aplicaremos directamente con la ayuda de una espátula y una llana. Después de una primera mano, comprobaremos que se van perdiendo los relieves que tenía el azulejo.

Una vez que el plaste haya secado, pasaremos una lija fina por toda la superficie y limpiaremos el polvillo desprendido.

Aplicaremos una segunda capa de plaste con la que, ahora sí, dejaremos la superficie de la pared completamente lisa.

Otro lijado fino con su consiguiente limpieza de polvillo desprendido y ¡ya tenemos la pared lista para recibir la primera mano de pintura!

Limpia la superficie con un trapo para eliminar polvo, suciedad o restos de detergentes, grasa, etc. Este paso es muy importante, ya que una mala limpieza traerá como consecuencia problemas de adherencia de la pintura. Si encuentras manchas difíciles de quitar, prueba con Limpión de Beissier. ¡Hay pocas cosas que se le resistan!

Utiliza plásticos o papel de pintor, así como cinta de carrocero, para cubrir los muebles, el suelo y todas aquellas zonas que quieras proteger de goterones y brochazos accidentales.

Todo Terreno al agua es una pintra e impriación «todo en uno», por lo que no precisarás de imprimaciones previas. Simplemente abre el bote, remueve un poco su contenido y aplica directamente sobre la pared. Te recomendamos que empieces usando un pincel en las esquinas y otras zonas de difícil acceso y desupués utilices el rodillo en el resto de la pared.