Hay proyectos que requieren trabajar directamente con el interior de la pared, una labor que puede parecer únicamente indicada para bricoladores expertos.
Tanto a la hora de embutir interruptores en la pared como introducir cables, barandillas o tubos, integrar estos elementos en la pared permite una función estética al ocultarlos a la vista y ahorrarnos espacio.
¡No te preocupes si te parece demasiado complicado! Hoy te enseñamos mediante 3 pasos cómo puedes hacerlo en tu propia casa.
Abre la pared
Este es uno de los pasos que aparentemente más difícil suele parecer a los bricoladores nóveles. Tan sólo tienes que asegurarte de desconectar la electricidad y evitar picar en alguna zona de tuberías o cables.
Marca con un lápiz la zona donde quieres colocar el cable o tubería y con la ayuda de un cincel y un martillo vamos abriéndonos camino hacia el centro de la pared. Procura que sea un poco más ancho y profundo que el tamaño de los elementos que vayamos a empotrar.
Tapa la zona
Para tapar esta zona, necesitarás una masilla especial para fijar elementos y rellenar agujeros de gran tamaño. Te recomendamos Aguaplast Rapiduro si quieres colocar anclajes en la pared y Aguaplast Rapiduro o Aguaplast Express si tan solo pretendes rellenar la zona.
Mezcla el plaste con agua hasta crear una masilla cremosa y aplica abundante cantidad sobre la zona hasta taparla completamente. Una vez hecho alisa con la espátula para dejar la superficie lo más lisa posible, aunque no te preocupes si quedan relieves e imperfecciones.
Aplica otra capa más para garantizar el recubrimiento total.
Alisa y pinta
Cuando la superficie se haya secado (de forma rápida en el caso de ambos productos), desliza una lija encima para pulir la pared. No es necesario ejercer fuerza y notarás como es bastante sencillo.
Al acabar pinta encima de un color parecido al de la pared o si lo prefieres dale un aire nuevo a todo el cuarto utilizando un tono de pintura nuevo.