A la hora de realizar un proyecto es importante saber qué tipo de herramientas necesitaremos. A continuación te mostramos algunas de las que necesitarás para renovar o reparar tu pared, ¡mira!
- Espátula. Esencial si pretendes reparar grietas, golpes o agujeros puntuales en la pared con masilla. Permite manejar y aplicar cierta cantidad de material de forma sencilla. Además, con esta herramienta, es muy sencillo dar pequeños retoques y alisar el producto.
- Llana. Para aplicar masilla sobre grandes superficies (como por ejemplo a la hora de eliminar el gotelé o reparar grandes desperfectos) tendrás que utilizar una llana, ya que permite aplicar y alisar gran cantidad de material sobre la pared. Puedes acompañarla con la espátula para colocar el material sobre la llana de forma más rápida.
Recuerda que ambas herramientas deben ser de acero inoxidable, plástico o goma para evitar que se oxiden con el tiempo.
- Rodillo. Además de para pintar grandes superficies, esta herramienta puede utilizarse para eliminar el gotelé con la masilla Aguaplast Rodillo. No te olvides de limpiarlo adecuadamente una vez hayas finalizado el proyecto.
- Brocha. Perfecta para pequeños retoques, por ejemplo en las zonas cercanas al papel de carrocero protector que hayamos colocado. También permite aplicar detalles sobre elementos o zonas reparadas.
- Lija. Cuando la masilla se seca, es frecuente que no quede todo lo lisa que quisiéramos. En estos casos, la lija es tu aliada. Simplemente pásala por encima de la reparación aplicando una ligera fuerza. ¡Así de sencillo! Ya podremos dejar la superficie tan lisa como el primer día.
- Cubo o recipiente: Si pretendes trabajar con pintura o con plaste (masilla en polvo que es necesario mezclar con agua) necesitarás un lugar en el que mezclar los ingredientes y aplicarlos sobre la pared.
Para ahorrarte este paso puedes utilizar masilla ya lista al uso, disponible en un cómodo formato de tarro.
